domingo, 1 de noviembre de 2009

sigue la crisis mundial

esto lo di
esto lo dice todo

LOS HOMBRES TAMBIEN LLORAN

El antiguo estereotipo de que los hombres son el sexo fuerte, de que nunca lloran ni muestran abiertamente sus sentimientos, es un mito enterrado en el pasado de los que no quieren ver más allá de su propia naturaleza.
La depresión en los hombres es más difícil de diagnosticar que en las mujeres, ya que no se expresa de la misma forma y debido al mito de qué dirán, les cuesta a ellos mismo reconocerla y manifestarla, por lo que queda todo interiorizado y posteriormente es expresado en forma de conductas desconcertantes, e incluso agresivas. También tratarán de evadirse mediante la práctica en exceso de deportes, consumo de drogas o alcohol. El mostrar sus sentimientos de alguna manera, supone una “sanción social”. Se les considera inmaduros, niños e incluso personas cobardes que no saben afrontar la vida.
Todo es una inventiva de esta sociedad, que crea estereotipos sexistas sin tener en cuenta a las personas como tales. Lo que primero somos, es personas; después viene la condición sexual.
Las detonaciones en las tristezas masculinas suelen ser consecuencia de temas sentimentales y de trabajo, después estará el estrés y otros problemas sociales. Pero ellos también tienen la necesidad de expresar sus sentimientos, tienen derecho a derramar lágrimas si quieren. ¿Por qué se les niega tal evidencia? Se tiende a etiquetar de que todos son iguales, cayendo en una farsa inventada por la sociedad, la cual se resiste a estructurar a todos los individuos en igualdad. Ningún individuo es igual, aunque por razones culturales o sociales, se tienda a comportamientos parecidos. Existen hombres con una sensibilidad extraordinaria, incluso superando a la femenina. Tenemos el ejemplo de los artistas, los pintores, los poetas…sin sensibilidad es imposible plasmar una obra de arte.
Saber dar y recibir sentimiento, emoción y ternura enriquece a las personas. Es preciso vivir intensamente los afectos. Expresarlos. Compartirlos. Hay quien no es capaz de recibir afecto porque lo considera peligroso o porque no se encuentra lo suficienteme digno de ese amor. Hay quien no sabe darlo a través de las pequeñas e infinitas modalidades de la ternura. Por eso resulta tan necesaria la educación sentimental.
Los sentimientos se expresan de múltiples formas a través de pequeños gestos. Hay que practicar. Para ello hace falta constancia y lentitud.
Llorar es parte de la esencia del hombre, dejemos que libremente vuele el destino de las lágrimas…..